Ayer fuiste pirómana, hoy bombera.
Si pudiera elegir te haría barrendera.
Entreabro las ventanas porque vuelve el calor.
Cualquier mínima brisa
avienta las cenizas de mi estancia.
No es cómodo digamos a la hora del descanso
contemplar las vajillas,
los vidrios del balcón, los muebles, las cortinas,
los platos en la mesa, las flores del jarrón,
la foto de mi abuela que nunca conocí.
Hasta mi perro blanco ahora es gris,
y las plumas de mi canario verde,
y mi felpudo azul celeste del portal.
Si pudiera pedir
diría que volvieras
a barrer con vigor tanta ceniza.
O mejor quédate.
Haz trizas la manguera
y tráete más yesca y pedernal.
sábado, 18 de mayo de 2024
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