Me digo que soy feliz
pero en mi pueblo no recuerdo la última maceta adornando un balcón.
(Posiblemente haya alguna todavía. No lo sé.)
Yo podría también colocar una maceta en mi balcón, pero sería una impostura
como pintarme el pelo para esconder las canas o comenzar a asistir a algún tipo de gimnasia para las articulaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario